¿Quo vadis?
Pintado por Annibale Carracci (1560-1609),
Pintado en 1601,
Óleo sobre tabla
© National Gallery, Londres
Si alguien quiere ser seguidor mío, que tome su cruz
Mateo 16:24-28
Jesús dijo a sus discípulos: 'Si alguien quiere ser seguidor mío, que renuncie a sí mismo, tome su cruz y me siga. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mí, la encontrará. ¿Qué ganará, pues, un hombre si gana el mundo entero y arruina su vida? ¿O qué puede ofrecer el hombre a cambio de su vida?
Porque el Hijo del Hombre va a venir en la gloria de su Padre con sus ángeles y, cuando lo haga, recompensará a cada uno según su conducta. Os digo solemnemente que hay algunos de los que están aquí que no probarán la muerte antes de ver venir al Hijo del Hombre con su reino.'
Reflexión sobre el cuadro
En la lectura del Evangelio de hoy, Jesús dijo a sus discípulos Si alguien quiere ser seguidor mío, que renuncie a sí mismo, tome su cruz y me siga". Nuestro cuadro de hoy, obra de Annibale Caracci, es un excelente ejemplo de este pasaje del Evangelio en acción. San Pedro es representado huyendo de Roma para evitar ser crucificado y tiene una visión del encuentro con Cristo cargando su cruz, caminando en dirección contraria. Pedro le pregunta a Jesús "Quo vadis" ("¿A dónde vas?"), a lo que Cristo responde:Romam vado iterum crucifigi("Voy a Roma para ser crucificado de nuevo"). Al darse cuenta de que ya traicionó a Jesús una vez durante la Pasión negándolo tres veces, no quiere volver a cometer el mismo error de abandonar a Jesús y a su iglesia. Pedro se da la vuelta y vuelve a Roma para enfrentarse al martirio. San Pedro es pintado aquí en un estado de shock al ver a Cristo. Cristo, en cambio, es pintado como un atleta musculoso que lleva la cruz. El pie de la cruz apunta hacia nosotros como espectadores. También el brazo derecho de Cristo, que apunta decididamente hacia delante, invitándonos a llevar nuestra cruz y seguirle.
Este episodio "Quo Vadis" de San Pedro es la última vez que Pedro necesitaría ser "redirigido" por Jesús. Después de esto, la Iglesia que comenzó en Jerusalén se convirtió en romana, principalmente porque Pedro y Pablo llevaron el Evangelio a lo que entonces era el corazón del mundo pagano y porque ambos murieron allí.
En nuestra lectura de hoy, Jesús dice a sus discípulos y a nosotros que tomemos nuestras propias cruces... una cruz que es única y muy diferente para cada uno de nosotros.
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Pedro le cortó la oreja al sucio, negó a Jesús tres veces y huyó y se escondió y luego no apareció en la cruz y volvió a su antigua vida. Sin embargo, Jesús se acercó a él y le dijo: "¡Ven, puedes ser la roca de mi iglesia! ¡No es de extrañar que Pedro pareciera sorprendido! ??? Xxx
¿El segundo párrafo hace referencia a la segunda venida?
Cambiar el alma por el mundo (incluso por todo el mundo) no es seguramente una decisión inteligente, sino que nos seduce regularmente.
El segundo párrafo es interesante. ¿Se refiere al fin de los tiempos?
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